viernes, 16 de junio de 2017

Mi primer entrada para el blog…

En un principio no sabía de que iba a hablar, aunado a que no soy muy bueno escribiendo. Pensando, me di cuenta que debe de ser de las cosas que más disfruto, y una de ellas es la fotografía.
Desde pequeño siempre me gustó tomar fotos. Tal vez no era “el profesional” (era un niño) pero era muy divertido y emocionante. Desde poner el rollo en la cámara; el flash, que eran unos cuadritos que se quemaban de un lado cada vez que se usaba y tenías que darle la vuelta para usar todos los lado; el llevar el rollo a revelar y esperar a que te entregaran las fotos. Ver como habían salido era toda una aventura.



Ahora en el momento sabes como salió la foto y se perdió un poco esa emoción.
Se puede decir que recientemente redescubrí el gusto por tomar fotos, y como todo en la vida uno no deja de aprender. He entendido muchas cosas, como que no necesitas la cámara más nueva, ni la más sofisticada, ya que la cámara no toma la foto si no tú eres quien haces la foto. Aquí ya entra en juego la creatividad y el buen ojo.
No soy un fotógrafo, más que nada soy amateur, y solo es por el gusto de tomar fotos. Es reconfortante, si no descubrir nuevos talentos en uno, el hecho de explotar aquellos talentos que no habíamos desarrollado.
En muchas ocasiones no tengo el tiempo de materializar las ideas locas que se me ocurren, pero me puse como meta el aprender a sacarle el máximo provecho a mi cámara viejita, tomar más fotos, he visto publicados en la red el hacer retos semanales te ayuda a seguir desarrollando tus habilidades.
Este post no es para dar las técnicas o las instrucciones para una foto, es más que nada para animar a tener un hobbie, un pasatiempo que te ayude a salir de la rutina, distraerte y olvidarte de lo que te preocupa.

Este es uno de los míos, ¿tú cuál tienes?

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